Calculadora de rentabilidad para alquiler
Calcula rápidamente la rentabilidad bruta, neta y el chashflow de la inversión que estás analizando.
Debes ingresar información como el precio de compra del inmueble, el precio de alquiler estimado, el impuesto de transmisiones patrimoniales (ITP), gastos mensuales, gastos de reforma o adecuación, el porcentaje de financiación, el interés anual y el plazo de la hipoteca (si aplica).
De manera predeterminada el formulario tiene en cuenta unos gastos anuales por encima de la media como seguro contra posibles imprevistos. Los gastos contados son:
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Impuestos (IBI, basuras…) 130€
Seguro de impago 240€
Seguro hogar 110€
Comunidad propietarios 360€
Mantenimiento 396€
Períodos vacío 600€
Hemos aplicado un valor estándar de 1200€ para que no tengas que modificarlo. Esta valor puede cambiar pero es una aproximación.
El impuesto de transmisiones patrimoniales (ITP) puede variar según la jurisdicción y la legislación local. Debes consultar con las autoridades fiscales locales o un profesional fiscal para obtener el valor preciso del ITP aplicable a tu inversión. Te dejamos aquí un artículo donde puedes consultarlo, aunque lo más recomendable es que revises tú mismo el tipos impositivo actual o que se te aplicaría.
El flujo de efectivo mensual es la cantidad de dinero que obtienes cada mes después de pagar la hipoteca y los gastos mensuales. Se calcula restando la cuota mensual de la hipoteca y los gastos mensuales del precio de alquiler mensual.
Un valor negativo en la rentabilidad neta indica que los costos y los gastos superan los ingresos por alquiler, lo que significa que la inversión podría no ser rentable. Es importante considerar cuidadosamente estos resultados y evaluar si la inversión es adecuada en ese caso.
Sí, la inflación es un factor importante a considerar en tus cálculos, ya que puede afectar tanto los ingresos por alquiler como los costos a lo largo del tiempo. Puedes ajustar tus estimaciones para tener en cuenta la inflación a lo largo de la vida de la inversión.
No, la calculadora se centra en proporcionar una estimación de la rentabilidad bruta y neta en función de los ingresos y los costos actuales. La apreciación del valor de la propiedad es un factor adicional que puede afectar la rentabilidad a largo plazo y debe considerarse por separado.